por Reynaldo Magaña
Claudia Agatón ha hecho historia al convertirse en la primera mujer que encabeza la presidencia municipal de Ensenada. En una ceremonia emotiva, con la entrega del Bando Solemne por parte de la presidenta del Congreso local, Dunnia Montserrat Murillo López, y en presencia de la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, Agatón asumió el liderazgo de una ciudad que espera ver en ella un agente de cambio y desarrollo. En este contexto, es momento de darle la oportunidad de desarrollar su gobierno y concederle el beneficio de la duda, con la esperanza de que su administración logre mejorar la calidad de vida de los ensenadenses.
Desde su mensaje inicial, Claudia Agatón ha dejado en claro cuáles serán las bases de su mandato: "el derecho al bienestar" de los ciudadanos de Ensenada. Con una postura humilde, alejada de arrogancias y sin intenciones revanchistas, la nueva presidenta municipal prometió integrarse completamente con la ciudadanía y construir un gobierno que se enfoque en la escucha activa y la participación comunitaria. Este tipo de liderazgo es precisamente lo que se necesita para llevar adelante un municipio diverso y complejo como Ensenada, con problemas que requieren de la integración de todos los sectores de la sociedad.
El primer paso hacia un gobierno sólido y responsable es reconocer las áreas de oportunidad, y en este sentido, Agatón se ha comprometido con una serie de acciones que parecen esenciales para el municipio: la reparación de calles y carreteras, la atención a la problemática del agua y la modernización de la central de autobuses. Estas iniciativas reflejan un enfoque en la infraestructura básica y las necesidades cotidianas de los ciudadanos. Ensenada es una ciudad que, con frecuencia, ha quedado relegada en cuanto a servicios fundamentales se refiere, por lo que estos compromisos resultan alentadores.
Es importante destacar que, más allá de las obras de infraestructura, Claudia Agatón ha mostrado un compromiso claro con la transparencia y la rendición de cuentas. Anunció la implementación de un día de audiencia pública semanal y ruedas de prensa periódicas, elementos que constituyen puentes de comunicación directa entre el gobierno y los ciudadanos. Este tipo de apertura hacia la comunidad permite, no solo fortalecer la confianza de los ciudadanos, sino también trabajar de forma más eficiente en la resolución de problemáticas comunes. La idea de pedir a los funcionarios de las distintas dependencias que proporcionen a la prensa toda la información solicitada es una señal de que su administración buscará mantener una política de puertas abiertas.
A lo largo de su discurso, Claudia Agatón insistió en que su gobierno será "incluyente, siempre disponible y responsable". Prometió un "gobierno facilitador", en el que la premisa sea cómo encontrar soluciones, en lugar de presentar obstáculos. Este enfoque resulta esencial para el desarrollo de Ensenada, un municipio que necesita oportunidades, inversión y un acompañamiento activo para mejorar las condiciones de vida de sus habitantes. En lugar de un enfoque restrictivo o burocrático, la promesa de Agatón de buscar siempre "cómo sí" resolver los problemas del municipio es la muestra de una voluntad política diferente, enfocada en el progreso.
Una de las cuestiones más complejas que deberá enfrentar la presidenta municipal es la situación financiera del municipio. Reconoció que las finanzas públicas son complicadas, con una deuda considerable que no es nueva para ella, ya que, durante su etapa como diputada local, tuvo la oportunidad de analizar las leyes de ingresos municipales. A pesar de ello, Claudia Agatón ha mostrado disposición para revisar con detalle el estado actual de las finanzas, en un esfuerzo por asegurar que las decisiones económicas se tomen con base en la información más precisa posible. Esta es una señal de que su administración no tomará decisiones a la ligera y buscará poner orden en las cuentas municipales.
Respecto a los nombramientos de los funcionarios que la acompañarán en este proyecto de gobierno, Agatón afirmó que se irán dando a conocer gradualmente a lo largo de la semana. Esta medida parece prudente y refleja una intención de no apresurarse en decisiones que serán fundamentales para el éxito de su administración. En este sentido, es justo concederle el tiempo necesario para rodearse de personas capacitadas y comprometidas con el desarrollo de Ensenada.
Finalmente, uno de los puntos más ambiciosos planteados por la presidenta municipal fue la posible instalación de un "bus travel" en la avenida Reforma, una propuesta que, aunque ambiciosa, se someterá a estudios de factibilidad. Ensenada, siendo un destino turístico, requiere de proyectos innovadores que potencien su atractivo y su infraestructura, y aunque este proyecto pueda parecer complejo, el hecho de plantearlo desde un enfoque realista, basándose en estudios, resulta positivo.
En conclusión, Claudia Agatón se presenta como una líder con la intención de llevar a cabo un gobierno cercano, responsable y orientado al bienestar de todos los ciudadanos de Ensenada. Ha sido clara en sus compromisos y, sobre todo, ha dejado en evidencia que desea escuchar a la gente. En este contexto, es justo darle la oportunidad de demostrar su capacidad de gestión y el beneficio de la duda para desarrollar un gobierno que, como ella misma lo señaló, sea facilitador, incluyente y orientado a resultados concretos. Ensenada merece una oportunidad de cambio, y Claudia Agatón, como la primera mujer en la historia del municipio en ocupar este cargo, tiene el potencial para liderar este proceso de transformación.
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